The broken one.

Pausa. Rebobina. Play. Y así continuamente. Y es que, a veces, llegamos a un punto en el que no sabemos si retroceder o avanzar, no sabemos, o no podemos. El hecho es que ahí nos paramos. A veces nos estancamos en un recuerdo, porque queremos, ya que la realidad en la que vivimos en ese momento no es tan maravillosa como la de dicho recuerdo. Sea por lo que sea, estancarse no está bien. Todas las mañanas te levantas, cumples con tu rutina, y eso cansa. Recuerdas el pasado, o anelas un futuro mejor. Pero las máquinas del tiempo no existen. Solo tú eres el dueño de tu sino. Pero nunca nos damos cuenta de eso, esperamos que algo nos dirija, ¿el viento? ¿el tiempo? Estancamiento. Llega alguien a nuestra vida y pensamos que con esa persona todo irá como la seda, play para siempre. Error. Estancamiento. Si tú no mueves tus fichas de la ajedrez, perderás, y dejarás de ser Rey o Reina. Y sé que a nadie le gustaría ser un plebeyo de su propio destino, ¿verdad?
¿Tienes sueños? Ve a por ellos. No tienen que aprobarlos ni tus padres ni nadie, solo tú. Si es lo que quieres, y lo que crees que te hará feliz, a por ello. ¿Que te equivocas? ¡Que les jodan! Todos cometemos errores, es lo que nos hace los seres más perfectos.
Al fin y al cabo, todo gira en torno a uno mismo. Parate. Respira. Escucha lo que dicen. ¿Quién? Querido, toca hacer un pulso cabeza corazón.

This is love.

Respirar. Sentir el frio entrar en tus pulmones. Levantar los brazos y notar la helada brisa. Parpadear al compás de las notas que salen de tus cascos. Sonreír al ver al sol esconderse. Echar vapor por la boca a la vez que sueltas un grito de libertad. Mirar a tu alrededor, y ver que no eres la única que grita. Pararte a mirar, y grabar ese recuerdo en la memoria. Cara por cara, gesto por gesto, sonrisa por sonrisa.
Volver a respirar y no querer irte de ese tejado nunca en la vida.
Momentos como esos, con sus pequeñas locuras, juegos y risas. Entre atardeceres extremos y con cajas en forma de corazón. Con humo saliendo de entre tus labios y el frío calándote los huesos. Con vistas de invierno, y mares de olivos. Con pensamientos y miradas que lo dicen todo.
Momentos como esos, son los que me hacen querer vivir para siempre.

It's always darkest before the dawn.

Envejecer. Es mi mayor temor. Y no por el hecho de las arrugas, las enfermedades, o el simple hecho de hacerlo. Es porque cuando las personas envejecen pierden la pasión. Por sus ideales y creencias, pasión por el amor, por la vida. Pero la peor pérdida es la pasión por la música. Es como si no la sintieran correr por sus venas, como si ya no comprendieran sus palabras, como si sus notas no los hicieran volar ya.
Podría perderlo todo, pero sin la música...no quedaría nada.
La música es lo más puro que existe en esta vida. Nuestra verdadera amiga. Al envejecer perdemos la fe, la pasión, la melodía en nuestras venas.
La música me ha enseñado a vivir, a que el ayer siempre estará presente, a que con una pequeña ayuda de los amigos todo se puede, a que todo lo que necesita uno es amor. El amor. Me ha enseñado qué significa amar. Vivir intensamente.
También me ha enseñado el fondo, lo oscuro, pero no para dejarme ahí, si no para aprender a alejarme. En la vida habrá muchos momentos en los que te sientas perdido, al fin y al cabo, la vida es una montaña rusa, tan solo hay que aprender a agarrarse fuerte y se podrá aguantar la bajada para pegar el subidón. Si no aguantas el bajón, todo lo que habrá en ti será odio y dolor. Eso es el infierno...nosotros mismos.
Para eso aprendemos a sentir, y adquirimos fuerzas, para sonreirle al mismisimo infierno, respirar hondo, mirar al cielo y pensar: "Eh...soy feliz".

I'm falling to pieces.

Esos agarrones de pelo cuando te desesperas, esos nudos que se hacen dolorosos, esas respiraciones hondas que te relajan y secan tus lágrimas.
Sé que estás cansado de la vida, créeme cuando te digo que sé lo que es eso. Todos hemos pasado por ahí. Maduramos, y aprendemos a sufrir, y sufrimos, y nos cansamos de la vida, de ser fuertes, de aguantar.
Cada mañana te levantas con el pie izquierdo, y te tropiezas con el derecho. Ni siquiera lloras, porque estás seco, e incluso le rezas a un dios al que ni siquiera crees.
El hecho de sufrir nos hace cobardes y egoístas, nos negamos a pedir ayuda, y si nos la ofrecen, la negamos rotundamente. Todos hemos pasado por ahí, yo he pasado por ahí. Sé que te cierras en banda, yo lo hice, y todavía sigo así. Pero eso no me impide quererte y querer luchar por ti, si tú no lo haces. Si no te hablo es porque estoy enfadada contigo, sí, pero no me importa. Nos queda toda una vida por delante, y mucho más.
Porque en este verano he conseguido algo muy loco, y sé que nunca me olvidaré, básicamente porque nunca nos separaremos. Te he conseguido a ti. Y si hace falta removeré cielo y tierra para que seas feliz.
Porque yo nunca ganaría este juego sin ti.

Fix me.

Todo llega, todo pasa, todo termina. Esa es otra gran verdad de la vida, y hay que aceptarla. Todo llega. Personas, sentimientos, momentos, alegrías, penas, dolor, risas, lloros. Tal vez duren semanas, días, segundos, años, pero llegan, y entran en tu vida. Todo pasa. Todas esas pequeñas fracciones de segundo se quedan sin saber cuanto tiempo, y hacen su momento. Te hacen vivir, o morir, y entonces...Todo termina. Desaparecen, se esfuman, vuelan hasta ser invisibles. A veces te liberan, otras se llevan un pedazo de ti. Pero es así, se van, como todo y todos.
Aunque hay verdades de la vida que pueden ser alteradas, alguien las altera, por un sentimiento, un momento, una duda, algo pendiente. Y eso puede convertirse en otra cosa...
Todo llega, todo pasa, todo termina, todo vuelve.

Live laugh love.

-¿Por qué crees con tanta fuerza en el amor? ¿Por qué lo ansías tanto?
+El amor es la fuerza más fuerte que podrás ver nunca jamás en la tierra. Te da la suficiente potencia para esperar a una persona durante meses, para ir a la otra punta del mundo. El amor es tan poderoso, que puede matarte o elevarte a lo más alto en un segundo. A veces parecerá duro, doloroso, pero es que hasta el amor tiene un buen final. Si el final no es bueno, es que no ha acabado.
Para mí es incluso peor que la muerte. Yo nunca he sentido un amor tan fuerte, un típico amor de verano, o uno escolar. Pero lo que sí he sentido y sentiré siempre es el amor puro, el más suave y brillante que podrás encontrar. Es, simplemente, el amor en toda su esencia. Más de uno esto no lo entenderá. Pero yo siento el amor, a través del aire, de las sonrisas, de la luz del sol, de los atardeceres, de las mañanas de otoño; lo siento. El amor que te da aire, que te mueve e impulsa. El amor que siempre va junto con la felicidad.
-Pero, ¿dónde está ese amor?
+En cualquier persona, haz una cosa. Cuando estés en la calle, fíjate en las personas, míralas bien. Algunas pueden parecer tristes, o malas. Pero si estás atenta verás una fugaz sonrisa, la respuesta a todos los enigmas: La felicidad está en el corazón, junto al amor.
Cuando encuentres la felicidad, pase lo que pase, siempre habrá un destello de felicidad en ti.

Video games.

En este mundo, siempre han habido dos tipos de personas, o eso dicen, las que necesitan el amor, y las que dicen no necesitarlo. Es la afirmación más absurda que podrá oir un ser humano alguna vez en su vida.
Todas las personas necesitan amor, no el amor familiar, ni el de un amigo. Necesitan ese único amor, inconfundible, que hace desaparecer esa soledad. Si no me creeis, ¿por qué la mayoría de las veces os sentís solos? Siempre decís lo mismo, tengo una familia, amigos, no estoy solo, e intentais sobrevivir con ello. Y eso es verdad, en cuerpo y parte de alma no estáis solos, pero la otra parte de alma que queda, es para esa persona que todavía no ha llegado, y aunque sea la más mínima parte, duele, porque es la peor soledad. Te sientes...pesado, quemado, y ninguna palabra podría reconfortarte, excepto la de esa mínima parte del alma.
Por esa razón, me enervan los que dicen no creer en el amor, los que hablan de él como un absurdo. Hay personas que, de hecho, dicen saber lo que es el amor. Un videojuego. Cuando lo ves por primera vez te emocionas, con el tiempo te implicas con él y por él, pero llega el fin, te pasas el juego, y os olvidais el uno del otro. Quien habla así del amor es porque no ha vivido su amor de verdad. Sí, puede ser que haya vivido un amor perfecto, dulce e increible. Pero ese amor no era su parte de alma.
Después de todo esto, la escritora debe contradecirse, porque, a pesar de que creo en el amor con una fuerza inescrutable, he perdido toda esperanza de encontrar una parte de mi alma. Pero no me importa, siempre he sido fuerte, y puedo más que sobrevivir con el resto de cuerpo y alma.
Dicen que el mundo es mejor, perfecto, si alguien te está amando. Yo digo que nunca me ha gustado lo perfecto.