Vuelta al mundo en 40 años

Dicen que el amor es difícil, ¿por qué?
Yo lo veo así de fácil: cuando lo conoces te agrada, cuando te agrada te preocupa, cuando te preocupa te importa, y cuando te importa...quieres. Hay dos formas de querer, es ahí cuando el amor se vuelve difícil, no porque lo sea, si no porque nosotros aportamos las dificultades a la hora de decidir cómo queremos.

El verdadero amor, puede resultar muy fácil.

-Hola, estoy buscando a mi mujer. Está bien, si aquí es donde tiene que pasar, aquí será donde pase. No voy a dejar que te libres de mí, ¿qué te parece? Esta era mi especialidad ¿sabes? La sala de estar, me mandaban ahí y convencía a cualquiera. Y ahora es...no lo sé. Pero esta noche, nuestro proyecto, nuestra empresa, ha tenido una gran noche, una noche muy, muy grande. Pero no era completa, no estaba ni siquiera próxima a poder acercarse a completa. Porque no podía compartirla contigo, no podía oir tu voz, o reirme de ello contigo. Echo de menos a mi mujer. Vivimos en un mundo cínico, un mundo cínico, y trabajamos en un negocio de duros competidores, te quiero. Tú me completas. Y yo sólo...
+Cállate, simplemente cállate. Me tenías en el hola.

Aprehensión

En la vida vas aprendiendo diferentes cosas, aprendes a andar, a hablar, a comer solo, a bailar, todo gracias a personas que te enseñan cómo hacerlo. Pero nunca nadie nos enseña a amar, grave error, o no. Aprender a amar, sí, es duro, te estampas miles de veces contra la pared, pero cada vez es diferente, cada vez es más fuerte. ¿Y sabes por qué? Porque eso significa que has aprendido a amar, que lo estás haciendo, y con la persona correcta. Por eso no tengas miedo, tápate los ojos y cruza ese precipicio, sin miedo, porque solo así aprenderás a vivir.

Los últimos versos que yo le escribo

Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos. Porque Don Pablo tiene razón...Es tan corto el amor, y tan largo el olvido. Cuesta desprenderse de gente que lleva toda la vida contigo, que se ha reído de tus chistes, a pesar de no tener sentido, que ha cantado contigo a plena voz sin importarle quien fuera nuestro jurado. Sentir que has perdido esa parte de ti, esa confianza justa que te hacía ser feliz, pero dejar que tu orgullo lo supere todo, y saque la sonrisa mejor practicada frente al espejo. La noche está estrellada, y esa parte de mí, no esta conmigo. A lo lejos alguien canta, y pensar que nada ha cambiado, que todo será igual...Pero en ese momento lo recuerdas, ese pequeño inconveniente, ese fastidio que suele ser olvidado, esa maldición, y es que nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

No hay mañana

Soñadora, mimosa, inocente, impulsiva, solidaria, irónica, sensible, sincera, luchadora, orgullosa, fuerte, leal, descuidada, alocada, traviesa, perezosa, segura, sensata, tranquila, valiente, emotiva, amable, educada, tierna, espontanea...única. Sí, exacto, y no, no estoy siendo egocéntrica, porque tú también eres única, y tú, y tú...Todos somos únicos a nuestra manera: manías, tics, gustos, risas...Todo el mundo tiene ese muro de las maravillas. Hay un 50% de probabilidades de que no lo veas, pero lo tienes. ¿Que cómo lo sé? Porque creo en ti, y creo en mí, y en cada pequeña persona de este mundo, y sí, tal vez me implico demasiado, pero es así. Eres perfecto, nunca lo dudes, y nunca dejes de creer en ti, porque es lo único que te queda, y es que, al fin y al cabo, sois tú y tu muro de las maravillas. Así que vívelo, como si fuera el último día de tu vida, porque no...no hay mañana.