Video games.

En este mundo, siempre han habido dos tipos de personas, o eso dicen, las que necesitan el amor, y las que dicen no necesitarlo. Es la afirmación más absurda que podrá oir un ser humano alguna vez en su vida.
Todas las personas necesitan amor, no el amor familiar, ni el de un amigo. Necesitan ese único amor, inconfundible, que hace desaparecer esa soledad. Si no me creeis, ¿por qué la mayoría de las veces os sentís solos? Siempre decís lo mismo, tengo una familia, amigos, no estoy solo, e intentais sobrevivir con ello. Y eso es verdad, en cuerpo y parte de alma no estáis solos, pero la otra parte de alma que queda, es para esa persona que todavía no ha llegado, y aunque sea la más mínima parte, duele, porque es la peor soledad. Te sientes...pesado, quemado, y ninguna palabra podría reconfortarte, excepto la de esa mínima parte del alma.
Por esa razón, me enervan los que dicen no creer en el amor, los que hablan de él como un absurdo. Hay personas que, de hecho, dicen saber lo que es el amor. Un videojuego. Cuando lo ves por primera vez te emocionas, con el tiempo te implicas con él y por él, pero llega el fin, te pasas el juego, y os olvidais el uno del otro. Quien habla así del amor es porque no ha vivido su amor de verdad. Sí, puede ser que haya vivido un amor perfecto, dulce e increible. Pero ese amor no era su parte de alma.
Después de todo esto, la escritora debe contradecirse, porque, a pesar de que creo en el amor con una fuerza inescrutable, he perdido toda esperanza de encontrar una parte de mi alma. Pero no me importa, siempre he sido fuerte, y puedo más que sobrevivir con el resto de cuerpo y alma.
Dicen que el mundo es mejor, perfecto, si alguien te está amando. Yo digo que nunca me ha gustado lo perfecto.